En el contexto actual, en el que se incide y recuerda continuamente la necesidad de desinfectar y mantener las superficies limpias, el Servicio de Información Toxicológica (SIT) del Instituto Nacional de Toxicología y Ciencias Forenses (INTCF) ha detectado un aumento de avisos por intoxicaciones.
Los médicos del SIT han atendido durante marzo y las dos primeras semanas de abril 11.337 consultas telefónicas (1.655 llamadas más que en el periodo de 2019) de las que 1.846 fueron sobre intoxicaciones relacionadas con el uso de lejías y otros desinfectantes de superficies. En el 26,1% de los casos la lejía se había mezclado con otros productos, como amoníaco, salfumant, vinagre, alcohol, anticalcáreos, limpiahogar y lavavajillas.
No hay necesidad de mezclar la lejía con otras sustancias desinfectantes: esta es efectiva por sí sola y mezclar limpiadores podría provocar un cloro gaseoso tóxico peligroso para la salud.
La Lejía (NaClO) reacciona y destruye las proteínas del virus y su material genético. El Ministerio de Sanidad recomienda hacer una dilución en agua de 1:50